domingo, 22 de junio de 2008

Un maestro jardinero


¿Qué momento? Los papás preparan todo el verano a su hijo o hija para comenzar su primer año de jardín, y dicen frases como estas: "la seño te va a enseñar canciones" o "con la maestra van a dibujar", "la señorita es súper buena y cariñosa". Pero llegan al jardín para conocer a "las maestras" y la sorpresa es que no va a ser una maestra quien estará a cargo de su hijo o hija ese año sino que es UN MAESTRO.
En un primer momento a los papás se les generan algunas dudas y algunas confusiones. Hay cuestiones de género e idearios sociales que hacen que uno vea a la maestra de jardín como dulce y simpática, siempre sonriente, que nunca tiene problemas, y obviamente el hombre no entra en esa categoria, ¿un hombre dulce con los nenes? ¿tierno?, ¿que no tenga problemas?.
En la segunda etapa los nenes conocen a ese maestro y la realidad nos muestra que la relación que pueden entablar con él es súper rica, es desde otro lugar, pueden poner el cuerpo con mucha más seguridad y firmeza, pueden jugar a la lucha, pueden amar, pueden llorar y emocionarse, y por sobre todas las cosas pueden educar. Pueden responder otras preguntas como por ejemplo "¿Qué es más rápido un Porsche o una Ferrari?", ¿En que lugar de la tabla esta San Lorenzo?, pueden proponer otros espacios de juego, y además como en la vida misma los hombres son hombres y las mujeres son mujeres y se desenvuelven de maneras distintas. Eso mismo es el jardín, la vida misma, por eso esta bueno que hombres y mujeres puedan educar a la primera infancia porque cada uno a su manera dejará su sello personal en esos niños.
En la última etapa cuando la relación esta establecida con los niños y con los padres llega el momento de despedirse, y es ahí donde todos esos temores del primer día pasaron y los nenes se abrazan de ese hombre y los padres preguntan ¿El año que viene te volvemos a tener? La experiencia de tener un maestro jardinero es única e irreemplazable, hagamos lo posible para que nuestros hijos tengan la suerte de poder vivirla y disfrutarla.
Aca una experiencia para seguir leyendo.

Dedicado a Adrián un compañero, un amigo. Sabes que ese primer año que compartimos fue increíble y espero que no haya sido el último. La vida nos va a dar la posibilidad de ser otra vez una dupla.